Ya son cuatro años los que tiene este blog sobre protocolo y comunicación. Durante todo este tiempo han sido más numerosos los periodos de inactividad que los de fructífera actividad bloguera. Los motivos han sido varios, pero el más significativo fue mi etapa de doctoranda.
Sin embargo, desde el mes de julio de este año y desde el 7 de octubre de 2016, de manera ininterrumpida, he vuelto a tomar las riendas del blog.
Las razones son muchas: motivación, gusto por la escritura o compartir. Pero uno de los motivos principales fue el darme a conocer, el salir de mi habitáculo de cuatro paredes e intentar hacerme un hueco en este mundo del protocolo. Y la finalidad de esta decisión es poder trabajar haciendo lo que más me gusta.
Para ello busqué consejo para promocionar, con coste cero, mi blog y me aconsejaron, entre otras cosas, escribir todos los días en el. Desde el principio me asusté, ya que no sabía si iba a ser capaz de hacerlo. A fecha de hoy sigo temerosa en este sentido, pero voy cumpliendo el objetivo.
A pesar de esto, existen días que me cuesta mucho pensar sobre qué aspecto del protocolo o la comunicación escribir, me imagino que como a todo aquel que dirige un blog. Para solucionarlo, he pensado asignar a cada día de la semana un tema:
- Lunes: Derecho premial.
- Martes: Ceremonial religioso.
- Miércoles: Protocolo oficial.
- Jueves : Comentario de un libro.
- Viernes: Comunicación y Oratoria.
- Sábado: Protocolo social.
- Domingo: Libre.
Creo que con esta guía me resultará más fácil afrontar la entrada del día. Quizás con el tiempo tenga que hacer algunos reajustes para hacer frente a los contratiempos que, seguro, van a surgir. De momento, doy comienzo a mi planificación bloguera. ¿Qué os parece?